De la mano de Stephen Curry y de Kevin Durant, Golden State cumplió con el destino para llevarse la corona de la NBA por tercera vez en cuatro años, al vencer 108 a 85 a Cavaliers de Cleveland, en juego realizado en la Loans Arena de Ohio.

Lo hecho este viernes por el conjunto de los Warriors fue simplemente para sellar la buena temporada, ya que sólo fue cuestión de entablar una buena ofensiva para llevarse la corona, con un Curry batallador en la pintura al acumular 37 puntos.

Además de los 20 de Durant, quien no tuvo error en ser parte de la historia del conjunto “guerrero” para entrar en la vitrina de los monarcas de la NBA.

Mientras, en la contraparte, LeBron James intentó por todos los medios controlar la embestida rival con 23 unidades, pero no fueron suficientes para revertir la pizarra que desde el primer cuarto se inclinó a favor de Golden State con el arranque de Curry.

El cuadro visitante sumó su cuarto anillo desde 1975, 2015, 2017 y ahora en el 2018.

Cavaliers marcó su destino con un James emprendedor pero sin la fuerza necesaria para irse al frente además de Kevin Love (13) con su entrega en la cancha; fueron los dos hombres que trataron de conducir un navío que desde el primer juego era casi imposible de salvar.

Fue una serie arrolladora la que tuvo Warriors para la cuarta victoria final, pero sobre todo para demostrar que más allá de las individualidades la constante fue la entrega de cada uno de los elementos que entraron a la batalla esta noche.

Con Curry, Durant, así como Klay Thompson (10) y Draymond Green (9) como sus baluartes, Golden hizo historia y ahora a disfrutar de la corona hasta la nueva temporada.

Juego:

1     2  3   4  T

Golden State:   34 27 25 22- 108

Cleveland:        25 27 13 20-  85

 

NTX