Gran Bretaña suspendió el martes el regreso a las oficinas y declaró otras medidas para endurecer las previsiones contra el coronavirus, ante el agudo repunte de la enfermedad en el país.
Al anunciar el nuevo paquete de medidas, el primer ministro Boris Johnson dijo que la gente debe trabajar desde casa si es posible, mientras que los pubs, restaurantes y otros lugares deberán cerrar entre las 10 p.m. y las 5 a.m.
Agregó que Gran Bretaña se encuentra en un “peligroso punto de inflexión” y tiene que actuar ahora.
Las personas tendrán que cubrirse la cara en los taxis, así como en el transporte público. El tamaño de las reuniones se reducirá de 30 a 15 personas y se suspendió un plan para llevar a los espectadores a los estadios deportivos a partir de octubre.
Con información de AP