El expresidente Donald Trump está provocando una guerra interna en el Partido Republicano que podría socavar los intentos de oponerse al actual gobierno y de regresar al poder.
Al día siguiente de fustigar a Mitch McConnell, el principal republicano en el Senado, como “un politiquero amargado”, Trump el miércoles repitió la falsedad de que fue él quien ganó las elecciones de noviembre, en una serie de entrevistas con medios de derecha tras casi un mes de silencio autoimpuesto.