El gobierno de Biden restó importancia el lunes a la posibilidad de compartir vacunas contra el coronavirus con México y dijo que se centra primero en proteger a su propia población contra una pandemia que ha matado a más de 500,000 estadounidenses.
Las declaraciones de la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, se produjeron horas antes de que se espera que el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, le pida al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, que considere compartir parte de su suministro de vacunas COVID-19.