A 15 días del arranque de las renegociaciones del TLCAN, y ya que se tienen en blanco y negro los cuatro ejes prioritarios de la renegociación: competitividad, piso parejo para todos los actores, respeto a condiciones laborales y ambientales, así como consideración de pequeñas y medianas empresas, se abre el debate, en el último punto, sobre el emprendedurismo.
Para empezar el mercado bursátil debe consolidarse como una opción en el fortalecimiento de las Pymes que requieren mejorar su competitividad ante el complicado escenario internacional que se presenta, así como las nuevas exigencias ante la renegociación del TLC.
El mercado de deuda para las Pymes es una opción para contar con variedad de opciones de financiamiento y emitir títulos de deuda con plazos de vencimiento flexibles. Esa es la apuesta a la que deben aspirar los emprendedores y los capitales emergentes que buscan renovar su cartera de productos a nivel comercial.
El objetivo primigenio es que que las Pymes aumenten sus probabilidades de existencia a largo plazo y logren obtener recursos en el mercado bursátil. Pues este sector es de los que tienen un promedio de vida de siete años de existencia y luego desaparece sin buscar opciones de capitalidad o de mejorar su oferta.
En América Latina las firmas exitosas tienden a ser “pequeñas”, pese a tener 40 años o más de actividad y emplean cerca de 110 personas, mientras que en Asia Oriental tienen 170; en Europa Oriental, 220 y en países de alto ingreso a 250. El rezago se convirtió en el principal obstáculo de los emprendedores.
El futuro de la región latina dependerá de alcanzar un número mayor de emprendedores “transformacionales” de los que hay actualmente.
En América Latina los desafíos no son distintos y es probable que no le vaya tan bien, mientras las políticas se conviertan en paliativos de coyuntura y carezcan de proyectos de gran calado que trasciendan en espacio y tiempo a los gobiernos venideros, pues a lo que se debe apostar es al crecimiento, innovación y desarrollo tecnológico aparejado. Parece que es una fórmula compleja, pero si se concretan los resultados del crecimiento económico, la mejora en la calidad de vida de los habitantes será notoria
@drcamartinez