Corazón Enamorado

Muchas veces, hemos escuchado hablar del amor, ese sentimiento intangible y tangible a la vez, eso que sentimos reflejado en “mariposas en el estómago” cuando vemos a esa persona que nos hace suspirar, que nos hace soñar, que nos pone en un estado increíble donde el corazón salta como pocas veces lo hace.

Pero, ¿Qué es el amor?

¿Qué es el amor? Más o menos todos sabemos que es un “sentimiento” o “emoción” que podemos experimentar en algún momento a lo largo de nuestras vidas. No obstante, más allá de esto, todos tenemos ciertas concepciones acerca de cómo debería ser el amor.

Sin embargo, el amor no es ni muchísimo menos un concepto unitario ni de definición cerrada. Has de sentirte libre de amar a quien desbarate tus esquemas y haga de ti tu mejor tú. Aunque, por diferentes razones, en muchas ocasiones no lo hacemos.

Para mí, “el amor nos elige” Aquí te lo cuento…

Son muchas las canciones que nos explican qué es el amor o qué reflejo deja este sentimiento en nosotros. Las palabras que han de decirnos si estamos o no “enamorados” y qué se supone que se siente cuando la otra persona te corresponde o no lo hace.

“Porque el amor, es un hijo loco, que hoy regresó”

Si ya has estado o estás enamorado, sabes de sobra lo que se siente aunque no lo puedas expresar un una definición que semánticamente abarque todos los matices. Y, precisamente ese es el enigma y la magia del amor, que no es mesurable ni una elección.

Por eso digo que, la mayoría de las veces él nos ha elegido a nosotros, antes siquiera de que lo sepamos.

Cuando el amor nos invade: ¿cómo nos enamoramos?

Somos conscientes de que el amor no es algo meramente romántico cuando afirmamos que una pareja “tiene química”, que otra “no pega ni con cola” o que “se nos ha acabado el amor”. Estas afirmaciones muestran que sí sabemos que hay cierto componente biológico o fisiológico, pero también esconden  nociones de cómo nuestra cultura o influencia social media en nuestra manera de querer.

Y también existe el amor en las Personas con Discapacidad.

Aún se tiene el estigma de que una Persona con Discapacidad, por su “co condición de vida” no tiene las “facultades” para “enamorarse” y mucho menos para entablar una “relación sexual” como si estar en una silla de ruedas, como es mi caso impidiera expresar el sentimiento más puro.

Como alguna vez lo escribí, yo me he enamorado dos veces. Una en particular es la que más recuerdos me trae. A esta chica la conocí en un entrenamiento. Ella no tiene discapacidad. Mucho tiempo no nos vimos, y ella me enseñó y me quitó la creencia de que “nadie se fijaría en mi” Me enseñó a amar, pero sobre todo, me enseñó a respetar el amor, ¿A qué me refiero con esto? A  “amarme a mi mismo, como soy” A hablar de frente, sin rodeos. A hablar con el corazón en la mano.

Hoy escribo estas líneas porque mi gran amiga y cantautora Sophia Grey, escribió una canción con el titulo de mi columna, que por cierto me encanta. Y para decirles a todos que, “para amar, hay que amarse primero uno mismo” para ser un “corazón enamorado”

Con cariño y amor,

 

Xicani.

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.