Agitando carteles como “la coacción no es consentimiento” y “detener el mandato”, unos 200 empleados de Boeing Co y otros organizaron una protesta el viernes por el requisito de vacuna COVID-19 del fabricante de aviones para los trabajadores estadounidenses.

Boeing Co está lidiando con un nuevo defecto en su 787 Dreamliner que involucra ciertas partes de titanio que son más débiles de lo que deberían ser, informó el jueves el Wall Street Journal, citando a personas familiarizadas con el asunto.

Boeing Co elevó ligeramente su pronóstico el jueves para la demanda de aviones de China para los próximos 20 años, apostando por el rápido rebote del país de COVID-19 y el crecimiento futuro en su sector de aerolíneas económicas y comercio electrónico.

 El vicepresidente de marketing comercial de Boeing pronosticó el lunes que el tráfico europeo de pasajeros crecería un 3.1% anual en los próximos 20 años, y dijo que la demanda de aviones en la región seguiría aumentando a medida que avance la recuperación de COVID-19.

El gigante aeroespacial Boeing Co., con sede en Chicago, invertirá 200 millones de dólares para empezar a fabricar el último avión no tripulado de la Marina de Estados Unidos en el aeropuerto MidAmerica St. Louis, en un proyecto que podría generar más de 150 empleos en el campus de la empresa en el suroeste de Illinois, según un anuncio previsto para el viernes.

 Boeing revisó las previsiones de demanda a largo plazo el martes, ya que un retroceso en los viajes aéreos comerciales en mercados nacionales como los Estados Unidos templa las predicciones más sombrías de la industria vistas en el apogeo de los bloqueos por coronavirus el año pasado.

La entrega de Boeing de 787 Dreamliners probablemente permanecerá detenida hasta al menos finales de octubre, ya que la Administración Federal de Aviación ha rechazado la reciente propuesta de la compañía de inspeccionarlos, informó el sábado el Wall Street Journal.

Boeing Co registró el miércoles su primera ganancia trimestral en casi dos años, ya que las entregas de sus aviones 737 MAX más vendidos a las aerolíneas ganaron tracción en medio de un fuerte rebote en las reservas de viajes después de un aumento en las vacunas globales COVID-19.

Las tensiones de poder comercial, los obstáculos regulatorios y los intentos de Occidente de contrarrestar la competencia china están retrasando el regreso del 737 MAX en China, frustrando a Boeing Co mientras un rival potencial demuestra su creciente influencia.

El CEO de Boeing Co, Dave Calhoun, se enfrenta a un dilema multimillonario sobre cómo reconstruir las ventas en su negocio principal de aviones de pasajeros que ha provocado un debate interno y puesto en juego el futuro del mayor exportador de Estados Unidos, dicen los expertos de la industria.

Boeing Co pagará 17 millones de dólares en multas bajo un acuerdo de la Administración Federal de Aviación después de instalar equipos en 759 aviones Boeing 737 MAX y NG que contenían sensores que no fueron aprobados, dijo la FAA el jueves.

Legisladores estadounidenses clave dijeron el martes que están buscando registros de Boeing  y la Administración Federal de Aviación (FAA) sobre cuestiones de producción que involucran al 737 MAX y 787 Dreamliner.

Boeing informó el miércoles de una pérdida trimestral más pequeña, ayudada por una mejora en las entregas de aeronaves a medida que sus 737 aviones MAX vuelven a estar en línea y las aerolíneas se preparan para una recuperación en los viajes este verano.

Boeing pidió el viernes a algunos operadores de su avión 737 MAX que solucionaran un posible problema de producción relacionado con un sistema de energía eléctrica en el avión, lo que llevó a Southwest Airlines a eliminar 30 aviones MAX de su horario.

Boeing Co dijo el lunes que firmó un acuerdo de crédito renovable de dos años por 5,280 millones de dólares, mientras el fabricante de aviones estadounidense enfrenta una desaceleración prolongada en los viajes aéreos comerciales impulsada por la pandemia de COVID-19.

Boeing Co ha expresado su preocupación por el diseño del avión de fuselaje estrecho más nuevo de su archirrival Airbus, el A321XLR, diciendo que un nuevo tipo de tanque de combustible podría presentar riesgos de incendio.