El presidente estadounidense, Donald Trump, ratificó la suspensión de una regulación impulsada por el expresidente Barack Obama en 2012 para impedir que personas con problemas mentales puedan acceder a la compra de armas, es una victoria para los grupos pro-armas como la Asociación Nacional del Rifle (NRA).

Como ya habían anticipado, Trump colocó su firma en la legislación, es una de las primeras impulsadas por el nuevo Congreso estadounidense tras las elecciones presidenciales de noviembre pasado en las que el republicano se impuso a la candidata demócrata Hillary Clinton.

Los republicanos impusieron su mayoría tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado para sacar adelante esta legislación hace dos semanas.

La norma, que se calcula que afectaba a 75 mil personas, exigía que la Dirección de Seguridad Social comunicase al gobierno federal los nombres de las personas que recibiesen ayudas con historial de enfermedades mentales para que no pudiesen comprar armas.

La decisión fue aplaudida por la NRA, el principal grupo de presión a favor de las armas personales.

Sin embargo, las organizaciones a favor del control al acceso de armas también expresaron su rechazo. “No se equivoquen, este voto realmente trataba de aumentar el conjunto de posibles clientes de la industria de armas, a costa de aquellos en peligro de hacerse daño a sí mismos o a otros”, dijo Dan Gross, presidente de la Brady Campaign para prevenir la violencia de armas.

La medida que ahora ha sido revocada había sido impulsada por Obama dentro de su plan para aumentar los controles en el acceso a armas de fuego tras la matanza en un colegio de Newtown (Connecticut) en 2012, cuando fallecieron veinte niños y seis profesores.

Para conocer un poco más sobre el debate de armas en Estados Unidos, ve el siguiente documental realizado por Michael Moore, Bowling for Columbine:

Con información de EFE

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