El gobierno de Estados Unidos expresó hoy su preocupación por la detención en Venezuela de los líderes opositores Leopoldo López y Antonio Ledezma, pero se abstuvo de anticipar nuevas sanciones en contra del gobierno del presidente Nicolás Maduro.
“Esta acción es otra evidencia del autoritarismo del régimen de #Maduro #Venezuela #Derechoshumanos”, dijo en su cuenta de la red Twitter, el secretario de Estado adjunto interino para el Hemisferio Occidental, Francisco Palmieri.
Por separado, un vocero del Departamento de Estado que habló bajo condición de anonimato señaló que “Estados Unidos está profundamente preocupado por la decisión del gobierno venezolano” de enviar a prisión de nueva cuenta los dos opositores.
Tanto Ledezma como López se encontraban meses atrás en prisión después que el gobierno ordenó su detección por varios delitos, y el segundo fue condenado en 2015 a casi 14 años de prisión por instigar las protestas de 2014.
Dos semanas atrás López, exalcalde de Cachao, fue sacado de la cárcel de Ramo Verde y puesto bajo arresto domiciliario, semanas después de que las autoridades hicieron lo mismo con Ledezma, exalcalde metropolitano de Caracas.
Ambos fueron detenidos nuevamente pasada la media noche del lunes por presuntos efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (SEBIN), según la evidencia mostrada por videos, aunque se carece hasta ahora de confirmación oficial.
Uno de estos mostró con claridad a los agentes del SEBIN, entre ellos una mujer, trasladando a Ledezma a la salida de su domicilio, de donde es llevado con rumbo desconocido abordo de una camioneta de esa agrupación.
Las detenciones se dieron un día después de que Estados Unidos impuso sanciones económicas a los activos del presidente Nicolás Maduro, tras la realización de la elección de los miembros de la Asamblea Nacional Constituyente este domingo.
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