La líder de la minoría demócrata en la Cámara de Representantes estadunidense, Nancy Pelosi, protagonizó hoy un inusual maratón parlamentario para llamar la atención del país sobre la urgencia de aprobar un alivio migratorio a los jóvenes indocumentados “dreamers”, la mayoría mexicanos.

Pelosi, demócrata por California, subió a la tribuna de la Cámara de Representantes hacia las 10:00 hora local para hablar de decenas de historias personales de los jóvenes beneficiaros del programa DACA, y ha mantenido su alocución sin interrupciones por más de seis horas.

“No tengo intención de ceder”, dijo Pelosi en coincidencia con una movilización de cientos de “dreamers” en las inmediaciones del Capitolio, en la que pidieron a los legisladores incluir las protecciones legales a los indocumentados aprobados para el DACA en las negociaciones presupuestales.

Pelosi aprovechó una regla parlamentaria que permite a los líderes de la minoría o de la mayoría mantenerse en la tribuna por tiempo indefinido, una estrategia que tuvo el efecto de generar amplia atención mediática.

Casi simultáneamente, senadores demócratas y republicanos anunciaron un acuerdo presupuestal para financiar a las fuerzas armadas por dos años, sin incluir por el momento ningún tipo de consideración para otorgar protecciones legales a los “dreamers”, a quienes el DACA protege de la deportación.

Desde la tribuna, la líder de los demócratas dejó en claro que muchos miembros de su partido votarán en contra del acuerdo presupuestal, a menos que incluya una garantía del presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Paul Ryan, para votar un alivio migratorio.

Ryan ha señalado que la mayoritaria bancada de su partido sólo aceptara votar una iniciativa de ley que cuente con el respaldo de la Casa Blanca.

Los representantes republicanos se rigen por la llamada regla Hastert, según la cual sólo aceptan someter a consideración del pleno aquellas propuestas de ley que cuenten con el apoyo de la mayoría de miembros de su bancada.

Por el momento, no está claro si Ryan aceptará someter a voto alguna propuesta que cuente con el apoyo del presidente, pero no con el de la mayoría de los miembros de su partido en la cámara baja.

En tanto, cientos de “dreamers” procedentes de varios estados del país se conglomeraron en la Iglesia Luterana aledaña al Congreso, para pedir a los legisladores una solución permanente a su situación migratoria.

Raúl, un inmigrante indocumentado mexicano del estado de Oaxaca, viajó a Washington desde el estado de Nueva York, para hablar a nombre de sus tres hijos beneficiarios de DACA.

“No es justo que ellos se esfuercen, sean buenos estudiantes y que quieran quitarles DACA. Venimos aquí para protestar porque no es justo”, dijo a Notimex.

El emotivo encuentro de los dreamers fue apoyado por trabajadores afroamericanos del movimiento USA JOBS, así como por miembros de diversas denominaciones religiosas.

“Estamos juntos con los dreamers y vamos a trabajar y luchar por su libertad y por sus derechos para quedarse en este país”, dijo a Notimex el líder de la congregación luterana Mike Wilker.

NTX