Expresidente surcoreano Lee es arrestado por corrupción

El expresidente de Corea del Sur, Lee Myung-bak, fue arrestado hoy por acusaciones de soborno, malversación de fondos, evasión de impuestos y otros cargos, convirtiéndose en el cuarto exmandatario del país en ser detenido por corrupción.

La orden de arresto fue emitida este mismo jueves por el Tribunal del Distrito Central de Seúl para que enfrente al menos 12 cargos por corrupción y de ser encontrado culpable de todos ellos podría ser condenado a cumplir una pena de hasta 45 años de prisión.

Lee, de 76 años de edad, fue conducido desde su domicilio en el sur de la capital surcoreana hacia el Centro de Detención del Este de Seúl, donde fue asignado a una celda solitaria, de acuerdo con despachos de la agencia local de noticias Yonhap.

El exlíder es señalado como sospechoso de haber recibido más de 11 mil millones de wones (unos 10.2 millones de dólares) en sobornos de la agencia estatal de espionaje y de empresas, así como de malversar 35 mil millones de wones (31 millones de dólares) de una compañía que se dice es de su propiedad.

También es sospechoso de evadir impuestos relacionados y de otros cargos que incluyen abuso de poder, abuso de confianza, ocultamiento ilegal de documentos presidenciales y violación de la ley electoral.

Lee fue presidente desde 2008 hasta principios de 2013, después de haberse desempeñado como alcalde de Seúl, legislador y director ejecutivo de Hyundai Engineering and Construction.

Los fiscales solicitaron la orden de arresto contra Lee el pasado lunes después de una investigación de cinco meses sobre sus familiares y asistentes, así como luego de haber interrogado al expresidente durante más de 15 horas el pasado 14 de marzo.

Un juez de la corte de distrito aprobó la orden, reconociendo que los hechos relacionados con sus crímenes habían sido establecidos y describiéndolos como graves estimó que existe el riesgo de que destruya las pruebas.

El exmandatario dijo sentir un “sentimiento de culpa” y que pasó por “dolores” que encontró “difíciles de soportar” durante los últimos 10 meses de la investigación sobre corrupción.

“Espero que mi arresto disminuya los dolores de los que trabajaron conmigo (durante mi presidencia) y de mi familia”, agregó Lee, quien ha negado todos los cargos y rechazado haber tenido conocimiento de los presuntos delitos, atribuyendo las acusaciones a una “venganza política”.

La detención de Lee se produce aproximadamente un año después del arresto de su sucesora Park Geun-hye, quien también es acusada de corrupción, abuso de poder y tráfico de influencias, entre otros cargos.

Esta es la segunda vez que Corea del Sur ve a dos expresidentes tras las rejas al mismo tiempo, luego de que Chun Doo-hwan y Roh Tae-woo, que tomaron el poder mediante un golpe militar de 1979, fueron encarcelados por motín y corrupción en 1995, pero fueron liberados por un indulto presidencial en 1997.

El último presidente, Roh Moo-hyun, también fue investigado por presunta corrupción que involucró a su familia en 2009, mientras Lee estaba en el cargo, pero se suicidó mientras la investigación continuaba en mayo de ese año.

NTX

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