El futuro del tratamiento del glaucoma estará basado en la nanotecnología, en los nuevos medicamentos de liberación prolongada para la regeneración de células ganglionares y fibras nerviosas, a través de la creación de nanocables, afimó el especialista Jesús Jiménez Román.
Jiménez, quien participó en el World Ophtalmology Congress (WOC) 2018, presentando lo último en cirugía de Glaucoma, detalló que “la proyección es el diseño de estos nanocables mediante átomos de carbono que permitan el crecimiento de fibras nerviosas y las células con tal de recuperar el tejido perdido que causa la pérdida de la visión”.
También se espera un gran desarrollo en torno a la neuroprotección para pacientes con glaucoma y se busca considerar a esta enfermedad no solo como del ojo, sino del cerebro.
“Porque tiene una repercusión a nivel cerebral, todas las proyecciones de las fibras nerviosas llegan a la cisura calcarina, el lóbulo occipital donde se hace consciente la imagen y habrá algo que podamos visualizar para dar un tratamiento adecuado en base a una visión más neurológica”.
El especialista prevé que estos avances pueden estar listos en un lapso de 10 a 15 años.
Destacó que actualmente México es líder en Latinoamérica en tratamientos de glaucoma y precursor en medicamentos. “En los 80 había alrededor de tres medicamentos, ahora contamos con más de 40”.
Recordó que el glaucoma es una enfermedad considerada como un tema de salud pública en México, donde alrededor del 75 por ciento de personas que la padece no lo sabe debido a que es asintomática.
“Por eso es peligrosa, porque cuando se detecta, la mayor parte de las veces, el problema ya está avanzado, y lo que se ha perdido ya no se puede recuperar. Es una de las principales causas de ceguera. Ante esto es importante tomar en cuenta los factores de riesgo para acudir a tiempo con un especialista”.
Jiménez Román refirió como factores de riesgo la presión intraocular elevada, antecedentes familiares, corneas delgadas, y otros sistémicos como hipertensión arterial, hipotensión y diabetes.
“Cuando hablamos de factores de riesgo, no quiere decir que estos sean los causantes de la enfermedad, sino que están relacionados con el desarrollo del padecimiento”, anotó.
Dijo que es más frecuente que un paciente con antecedentes familiares de glaucoma, un mayor de 60 años o con presiones intraoculares elevadas desarrollen glaucoma a otra persona que no tenga estos factores.
Debido a que el daño de esta enfermedad es irreversible, es importante establecer el diagnóstico en etapas muy tempranas o seguir a los pacientes con dichos factores de riesgo que aún no han desarrollado la enfermedad, pero que puede tenerla.
Detalló que los pacientes que tienen algún factor de riesgo, se les denomina “sospechoso de glaucoma”, y a estos se les hace una evaluación completa, que incluye un estudio de nervio óptico mediante tecnología que deja ver si hay pérdida de fibras nerviosas o no.
“Si encontramos campo visual normal, pero alteraciones en nervio óptico, si tiene glaucoma, esta es una detección en fase muy temprana, cuando aún no impacta en el campo visual”, explicó Jiménez Román.
Compartió que siempre hay forma de tratar la enfermedad, pero el objetivo es detectarla a tiempo para que se tenga una mayor probabilidad de mantener una visión útil.
Resaltó la importancia de que la población mexicana tome consciencia de lo que implica esta enfermedad, por ello, desde hace 20 años, el Colegio Mexicano de Glaucoma realiza una campaña de difusión continua y permanente, que llevó a crear el Día Nacional del Glaucoma.
“Durante esta acción nos dimos cuenta de que había un ‘boom’ cuando se hacía la campaña, pero luego descendía la afluencia de pacientes, por eso creamos recientemente el programa Glaucoma México, auspiciado por el colegio y otros laboratorios como Alcon, para dar información a través de Facebook”.
Informó que la idea es poner a más actores dentro del programa, no solo de la industria farmacéutica, sino del gobierno e instituciones privadas que apoyen con la difusión.
NTX