El cumplimiento de la Agenda 2030 en la región depende de la capacidad de los países de movilizar recursos domésticos, para ello América Latina y el Caribe debe analizar opciones para fortalecer su recaudación y evitar que se erosionen sus bases tributarias, afirmó Alicia Bárcena.
La secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) dijo que en el desafiante contexto actual, caracterizado por un bajo crecimiento mundial, tensiones comerciales y volatilidad financiera, la región acomoda sus políticas fiscales para avanzar en la implementación de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030.
En la inauguración del XXXI Seminario Regional de Política Fiscal en Santiago, Chile, apuntó que la transición hacia un crecimiento sostenible e inclusivo requerirá de cambios, tanto en la política tributaria como de gasto público, a nivel de los gobiernos centrales y locales.
“El multilateralismo y las posiciones regionales contribuyen a construir estrategias para combatir problemas que enfrenta la región, como la evasión fiscal y los flujos ilícitos”, declaró ante ministros y autoridades de 10 países de la región, junto a expertos de organismos internacionales, academia, organizaciones de la sociedad civil y no gubernamentales.
En el evento que concluye este martes se dialoga sobre los desafíos y perspectivas que tendrá la política fiscal de los países para hacer frente el complejo escenario externo actual y apoyar la transición hacia un crecimiento económico más sostenible e inclusivo, en línea con la Agenda 2030.
Tras la sesión inaugural, Bárcena presentó el “Panorama fiscal de América Latina y el Caribe 2019″, publicación insignia de la Cepal que analiza los principales resultados de la dinámica fiscal de los países de la región y que este año muestra una mejora en la posición que, sin embargo, se ve contrastada con un alza en la deuda pública bruta.
Indicó que la Cepal propone cinco instrumentos para ampliar espacio fiscal y potenciar la Agenda 2030: reducir la evasión tributaria y los flujos financieros ilícitos; impulsar la adopción de impuestos a la economía digital y de salud pública.
Además, cambiar incentivos mediante impuestos ambientales para avanzar hacia la descarbonización de la economía y la reconversión productiva; revaluar los gastos tributarios; y fortalecer el impuesto sobre la renta personal y los impuestos sobre la propiedad inmobiliaria.
“Ningún país puede hacer nada de esto solo. Es necesario el espacio multilateral regional para el análisis y la coordinación fiscal en materias como, por ejemplo, la reducción de la evasión y los flujos ilícitos, la revisión y convergencia del uso de incentivos fiscales para la inversión, y construir posiciones conjuntas orientadas a reducir asimetrías globales y ampliar el diálogo con las transnacionales”, enfatizó.
El evento XXXI Seminario Regional de Política Fiscal es el principal referente para la discusión de las finanzas públicas a nivel regional, bajo la organización de la Cepal, con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), el Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), entre otros.
Con información de NOTIMEX