Este viernes el peso cerró con una apreciación, ganando terreno junto con la mayoría de las divisas en el mercado cambiario, tras la expectativa de que las negociaciones comerciales entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de China, Xi Jinping, serán exitosas y podrían concluir durante abril.

De acuerdo con Banco Base, la moneda mexicana se recuperó de las pérdidas observadas la semana previa, cuando la aversión al riesgo asociada a la desaceleración económica global, ocasionó una depreciación de 1.15 por ciento.

La entidad financiera subrayó que de manera interna disminuyó el nerviosismo por noticias relacionadas al gobierno federal, donde el mercado recibió de manera favorable los comentarios del subsecretario de Hacienda, Arturo Herrera, quien señaló que si hay que ajustar algo para cumplir con las metas del gobierno federal, no será el objetivo fiscal.

Sin embargo, destacó que a pesar de la recuperación del peso en la semana, no se descartan presiones al alza para el tipo de cambio, principalmente como consecuencia de un riesgo país más elevado en México.

Es probable que durante la segunda mitad de marzo y en abril se vuelvan a observar presiones al alza para el tipo de cambio, ante una probable confirmación de la desaceleración económica de México.

Lo anterior representa una amenaza para el cumplimiento de los objetivos fiscales del gobierno federal, en particular, el de mantener un superávit primario de 1.0 por ciento del Producto Interno Bruto en 2019.

Banco Base apuntó que aunque el peso ganó terreno en el corto plazo, principalmente por factores externos, una disminución sostenida de las posiciones a favor de la moneda mexicana, tiende a generar presiones al alza para el tipo de cambio.

En este contexto, al término de la semana, el dólar libre se vendió en un precio máximo de 19.60 pesos, nueve centavos menos respecto al cierre de ayer, y se compró en un mínimo de 18.05 pesos en sucursales bancarias de la Ciudad de México.

Con información de NOTIMEX