Recién concluyó la reunión de política monetaria de la FED de EUA y en línea con lo que esperábamos, la autoridad recortó su tasa de interés de fondeo en 25 puntos base a 2.0%, justificándose por las implicaciones de la situación global en la perspectiva económica estadounidense, en medio de un escenario de escasas presiones inflacionarias. En este sentido, la FED reiteró que actuará como sea necesario para apoyar la expansión económica.

La decisión fue dividida, con cinco integrantes del Comité votando por dejar sin cambios la tasa, cinco estuvieron de acuerdo en recortarla 25 puntos base y siete se pronunciaron por una baja de 50 puntos base. Esta misma división se presenta sobre los futuros pasos del Banco, ya que las decisiones se mueven entre los que consideran que  la incertidumbre por el tema comercial y el crecimiento global son razones suficientes para mayores bajas, con los que piensan que la economía estadounidense se mantiene fuerte, por lo que no es necesario hacer ajustes.

Asimismo, publicaron sus nuevas estimaciones económicas y financieras, destacando que para cierre de 2019 el nivel de tasa de interés debería de ser 1.9% (la estimación anterior era 2.4%), mantenerse en ese nivel hasta el final de 2020, subirse a 2.1% en 2021 y 2.4% en 2022.  La tasa neutral de largo plazo se mantuvo sin cambios en 2.5%. Estos ajustes en sus expectativas de tasas implica que al menos para los siguientes dos años, a la autoridad le gustaría no volver a reducir tasas y a partir del tercero pensar en regresar a su proceso de normalización. Esto en principio es una mala noticia para los activos de mayor riesgo, quienes apuestan a que los recortes de tasas deberían de intensificarse, pero la reacción no es tan negativa porque dado que al interior de la FED existe mucha división, sigue abierta la posibilidad de mayor flexibilización monetaria.

Respecto a sus perspectivas del PIB, mejoraron la de 2019 a 2.2% (desde el 2.1%) y la de 2020 la dejaron sin cambios.

Con relación al problema de liquidez que enfrentó el sistema financiero estadounidense en los últimos días, la FED optó por bajar la tasa que cobra a los excesos de reservas en 30 puntos base a 1.8%.

El peso mexicano reaccionó ligeramente negativo a la decisión de la FED, depreciándose hacia $19.40 spot. El hecho de que la FED no haya sido clara de que habrá mayores recortes de tasas en los siguientes meses es lo que generó esta presión.

En unos momentos más (1.30pm), el presidente Powell dará una conferencia de prensa para profundizar en los resultados del encuentro.