La economía mexicana podrá atraer mayor cantidad de Inversión Extrajera Directa en 2020 por la entrada en vigor del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) y la necesidad de mudar líneas de producción de China a otros países, opina Compass Group México.
El socio jefe para México de la firma, José Ignacio Armendáriz, y el gerente de inversiones, Luis Yance, dijeron a EL UNIVERSAL que “se puede empezar a ver a algunas empresas replantearse el que China sea su hub
principal de manufactura”.
Se observa “algo de reconfiguración” de las cadenas productivas globales, porque tener toda la proveeduría en China crea afectaciones como lo visto por la interrupción de suministros por el coronavirus.
El gerente de Inversiones afirmó que puede verse una mudanza de empresas chinas del sector automotriz, electrónico y hasta de nuevos sectores hacia México por la fuerza laboral altamente competitiva con que se cuenta, además de que desde el territorio nacional existe la oportunidad de posicionarse y capturar cuotas de mercado.
Yance dijo que puede llegar más Inversión Extranjera Directa a México en la “medida en que la administración actual sea más pragmática y amigable con sector empresarial”, porque se necesita realizar menos cambios en las reglas del juego.
Agregó que hay incertidumbre sobre el gobierno actual, a lo que debe sumarse la desaceleración económica. Como consecuencia, hay menores intenciones de invertir por las empresas, ya que no crece la demanda nacional ni el comercio exterior.
“Cuando traes incertidumbre local o global, pospones inversión”, señaló. Por eso, las empresas evalúan la conveniencia de reinvertir, ampliar capacidades y montar nuevos negocios si crece o no el consumo.
Armendáriz explicó que actualmente el centro de atención es el coronavirus, pero conforme pase el tiempo se tendrá claridad del impacto y duración.
Además, comentó que es momento de reevaluar las inversiones en portafolio, porque surgen oportunidades interesantes.
En todo momento “hay que guardar la calma y no sobrerreaccionar”, pues se observa un menor apetito por el riesgo.
Por el coronavirus los inversionistas buscan valores de refugio. Descartó que pueda decirse que México es inmune al entorno actual, pero no es el país epicentro de la epidemia, así que el impacto no será de la misma magnitud que en naciones en donde surgió la enfermedad.
Con información de EL UNIVERSAL