La pandemia de COVID-19 ha tenido dos grandes periodos. El primero fue el confinamiento al que obligó con el cierre absoluto de toda clse de puntos de venta, posteriormente vino la nueva normalidad, en que sigue existiendo el riesgo de contagio, pero la actividad económica se ha reapertura de manera limitada.

Ante estos dos escenarios, una pauta de gran interés es la que nos recuerda el valor que hay en poder desempeñar actividades pero con estimados realmente desoladores, pues se advierte de la terrible contracción que se ha registrado en todas las industrias, con retos que sorprenden por la manera en que tienen que innovar para seguir siendo relevantes.

El reto de los cines

Los cines son uno de los tantos negocios del entretenimiento que se han dado a la tarea de reabrir con toda clase de retos, como los que evidentemente enfrentan, que son el tener que reabrir en medio de la contingencia.

El entretenimiento se ha convertido en un servicio con todo tipo de experiencias, la cinematográfica, con salas de cine que tuvieron que cerrar de golpe todas sus salas y el streaming, que aunque mantuvo sus operaciones suspendió todas sus producciones.

La pandemia de COVID-19 ha causado estragos en todos los sentidos posibles y esto sin lugar a dudas a impuesto elementos que nos ayudan a poder dimensionar el tamaño de cómo esta pandemia ha replanteado el mercado.

Cifras de la Cámara Nacional de la Industria Cinematográfica señalan que del periodo que va de entre el 12 y el 15 de agosto de 2019 se registraron 3.7 millones de asistentes a las salas de cine. En el mismo periodo pero de este año, la cifra fue de apenas 107 mil boletos.

La información de la cámara advierte que ante este comparativo, este 2020 apenas se han vendido el 3 por ciento del total que se registró el año pasado, por lo que la contracción es brutal.

Ante esta situación se han ideado todo tipo de soluciones. Una de estas soluciones ha sido el estreno de las películas en día jueves.

Plataformas como Cinépolis se han aventado a colaborar con plataformas como tintos, para lanzar un festival de cine a través de esta plataforma.

Cinemex, pro ejemplo, se ha dado a la tare de implementar un negocio de autocinema, con el que ha buscado patentar el interés de la marca por mejorar su apuesta en el mercado, permitiendo a los asistente acudir y ver cintas a bordo de su automóvil.

El reto en entretenimiento

El reto en entretenimiento ante la pandemia que estamos viviendo es que las marcas han tenido que replantearse, ya que su negocio tradicional es inoperable ante las nuevas necesidades que se han impuesto en el mercado.

Lo anterior ha establecido una serie de desafíos, al momento de definir hacia donde orientar este negocio.

Con información de Merca 2.0