Enmascarados, socialmente distanciados y cada uno usando su propio bolígrafo para evitar la propagación de gérmenes, los portugueses se dirigieron a las urnas el domingo para votar por el cargo mayoritariamente ceremonial de presidente, incluso cuando los casos de coronavirus alcanzan niveles récord.
Las encuestas de opinión muestran que el actual presidente Marcelo Rebelo de Sousa, del Partido Socialdemócrata de centroderecha, probablemente gane con facilidad.