China estableció el viernes un modesto objetivo de crecimiento económico anual, por encima del 6%, y se comprometió a crear más empleos en las ciudades que el año pasado, ya que la segunda economía más grande del mundo planeaba un curso cuidadoso en un año interrumpido COVID-19.

En 2020, China eliminó un objetivo de crecimiento del producto interno bruto del informe de trabajo del primer ministro por primera vez desde 2002 después de que la pandemia devastó su economía. El PIB de China se expandió 2.3% el año pasado, el más débil en 44 años, pero lo que la convierte en la única economía importante que reporta crecimiento.