El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dijo el jueves que no se disculparía por hacer retroceder las políticas de inmigración de su predecesor republicano que socavaban la dignidad humana y descartaban las críticas de que los migrantes estaban haciendo el viaje a la frontera sur porque percibían que es un buen chico.

Hablando en su primera conferencia de prensa en la Casa Blanca, Biden buscó defender su manejo del aumento de la migración en la frontera entre Estados Unidos y México. Si bien en su mayoría adoptó un tono empático, dijo que Estados Unidos estaba expulsando a la gran mayoría de los migrantes, incluidas las familias, bajo una orden de salud pública COVID-19.

La orden de la era Trump permite a los agentes fronterizos expulsar rápidamente a los migrantes sin darles la oportunidad de solicitar asilo, pero ha enfurecido a los grupos de derechos civiles, que dicen que es ilegal.