El dólar retrocedió después de su reciente rebote el lunes cuando los inversores comenzaron cautelosamente una semana repleta de reuniones del banco central y datos económicos de gran valor de Estados Unidos, esperando pistas sobre las perspectivas de inflación global y las respuestas de los responsables políticos.

El comercio se rajó por las vacaciones en Japón, China y Gran Bretaña, que mantuvieron un control sobre la volatilidad, dejando el billete verde al comercio donde se estableció después de un salto del viernes. Se deslizó de nuevo a 1.2054 dólares por euro y se deslizó hasta un máximo de tres semanas de 109.66 yenes.