Por: Carsten Menke, director de investigación de Next Generation, Julius Baer

El decepcionante reporte de las cifras del empleo estadounidense del viernes propició efectos adversos para el oro y la plata, lo que llevó los precios a niveles máximos de varios meses. Lo que falta en el reciente aumento y sería necesario para reactivar el rally es la participación de los buscadores de refugios seguros. Debido a nuestra perspectiva económica constructiva, no esperamos que la demanda de refugios retorne pronto. Nos apegamos a nuestra visión Neutral ante el oro, pero podría justificarse un cambio hacia más Cautela si los precios suben más. En tanto, seguimos siendo cautelosos ante la plata. Luego de los datos de la Reserva Federal de EEUU para mantener la política monetaria de apoyo hace unas dos semanas, los mercados del oro y la plata también subieron ante las cifras decepcionantes del mercado laboral de EEUU del pasado viernes. Los precios subieron un 1.4% y un 1.8% en las noticias, respectivamente, impulsándolos a sus niveles más altos en cerca de tres meses. Esta fortaleza de los precios refleja principalmente un estado de ánimo positivo entre los operadores especulativos y de corto plazo y, lo que es más importante, un dólar más débil y rendimientos reales más bajos de los bonos estadounidenses.

Sin embargo, como ya se comentó, creemos que la debilidad del dólar no debería ser suficiente para elevar los precios de forma prolongada, mientras que los rendimientos reales deberían subir a medida que la economía se recupera. Lo que falta en el reciente aumento de precios y que sería necesario para reactivar el repunte es la participación de buscadores de refugios. Las tenencias de productos respaldados por oro, nuestro indicador preferido de la demanda por un refugio seguro, no han registrado entradas en meses. Dada nuestra perspectiva económica constructiva, tanto para Estados Unidos como a escala global, no esperamos que la demanda de refugios seguros regrese pronto. Si bien el problema de la inflación está cobrando relevancia por varias razones, ninguna de estas debería elevar los precios del oro y la plata de forma prolongada. Seguimos enfrentando un buen nivel de inflación, resultado de la recuperación económica, y no una mala inflación, lo que indica una pérdida de confianza en las principales monedas del mundo. Solo esto último operaría al alza para el oro y la plata. Considerando lo anterior, seguimos manteniendo nuestra visión neutral para el oro. Si los precios suben más, podría justificarse un giro hacia la Cautela. En tanto, seguimos siendo cautelosos ante la plata, ya que comparada con el oro, creemos que cotiza a niveles elevados.