Por segunda vez en menos de una década, la Reserva Federal se está preparando para lanzar un espinoso debate sobre cómo y cuándo poner fin a un programa masivo de compra de activos que ayudó a amortiguar una economía golpeada por la crisis, pero la dejó con una montaña de bonos que pueden permanecer en su balance en los próximos años.

La discusión de apertura de los funcionarios sobre cómo y cuándo reducir drásticamente los 120,000 millones de dólares en compras mensuales de bonos del banco central de EE. UU. parece que se producirá en la reunión de política de dos días de esta semana y tendrá lugar en un contexto dramáticamente diferente al de la última vez, cuando eran más temerosos sobre poseer una porción tan sustancial del mercado de bonos.

“Creo que la discusión comenzará” en la reunión de política de la Reserva Federal el martes y el miércoles, dijo Robin Brooks, economista jefe del Instituto de Finanzas Internacionales. “Creo que comenzará con mucha, mucha cautela”, agregó, y el presidente de la Fed, Jerome Powell, no tendrá prisa por concluirlo.