En una más de las decisiones sin sentido que ha tomado el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) durante la actual administración, decidió incluir al titular de la Fiscalía General de la República (FGR), Alejandro Gertz Manero al Sistema Nacional de Investigadores (SNI) en el nivel III, el cual dígase de paso, es el nivel mejor remunerado dentro del escalafón.
El ingreso del Gertz Manero al SNI se presenta meses después de que el Conacyt retiró apoyos a sus investigadores y mantiene sin recursos a algunos de éstos en el extranjero.
Cabe recordar que desde inicio del sexenio y con la riendas de la “siempre abierta a otros puntos de vista” María Elena Álvarez -Buylla el Conacyt, ha navegado de escándalo en escándalo, como ejemplo de esto tenemos los siguientes:
- El Universal detalló que el Conacyt pagaba millones de pesos por el servicio de comedor privado que incluía alimentos de primera calidad, orgánicos y hasta de importación.
- Se realizó el nombramiento de David Alexir Ledesma como subdirector de comunicación cuando ni si quiera contaba con una carrera universitaria concluida (debía materias).
- El tuit (que después fue borrado) en el cual la Dra. Álvarez-Buylla tildó de imbéciles a los miembros del equipo de comunicación de presidente López Obrador por (según ella) equivocarse con la fecha del segundo informe de gobierno.
- La contratación de Cristina Pouliot Madero, una experta en astrología, sí, astrología, no astronomía, como asistente personal de Álvarez-Buylla, así como encargada de la comunicación institucional.
- Los científicos en petroquímicos que después de ganar una beca Conacyt-Sener en hidrocarburos, que se mantienen varados en Reino Unido por la falta de recursos de parte de la institución.
- O la pelea que tuvo Álvarez-Buylla con el Dr. Mario de Leo Winkler, el entonces encargado del SNI, por no querer aceptar al esposo de la directora del Conacyt en el Sistema Nacional de Investigadores (por no cumplir con los requisitos de ingreso), lo que ocasionó que De Leo Winkler tuviera que presentar su renuncia de forma “voluntaria” a la institución.