La reforma planificada del sistema de pensiones por el gobierno francés no puede seguir adelante como se planeó a raíz de la crisis de COVID-19, dijo el jueves el presidente Emmanuel Macron.
“No creo que la reforma como se había previsto originalmente pueda seguir adelante como tal. Era muy ambicioso y extremadamente complejo y es por eso que generó ansiedad, debemos admitirlo. Hacerlo ahora mismo significaría ignorar el hecho de que ya hay muchas preocupaciones”, dijo Macron a los periodistas.