La libra esterlina se retiró aún más frente al dólar y el euro el jueves, encogiéndose de hombros con otro conjunto de datos económicos más fuertes y centrándose en el inminente fin de las restricciones de actividad, incluso cuando las tasas de infección por COVID-19 subieron.

Los mercados a nivel mundial estaban en un estado de ánimo incierto, ya que los sólidos datos económicos y las ganancias de las empresas, por un lado, se compensan con el aumento del número de casos de virus, especialmente en toda Asia.

Gran Bretaña está lista para eliminar todos los bordillos de actividad vinculados a COVID a partir del próximo lunes, incluido el uso obligatorio de máscaras. Mientras que dos tercios de los adultos británicos están completamente vacunados, los científicos advierten que otra ola de infecciones, especialmente de la variante Delta más transmisible, es inevitable cuando terminan las restricciones.