Los precios del oro subieron un poco a poco el lunes a medida que un dólar más suave y rendimientos de bonos más bajos en medio de una bolsa mixta de datos laborales de Estados Unidos disiparon las preocupaciones de los inversores sobre un ajuste de la política más rápido, ayudando al metal a subir hacia el nivel de 1,800 dólares una vez más.

El oro al contado aumentó un 0.3% a 1,791.26 dólares por onza, después de alcanzar su punto más alto desde el 18 de junio, en 1,794.86 dólares el viernes. La mayoría de los mercados estadounidenses cerraron el lunes por el feriado del Día de la Independencia.

El dólar ha renunciado a parte de su fortaleza reciente, y el oro “actualmente se está aferrando a algunas de las ganancias del viernes, una vez más desafiando la resistencia por delante de 1,800 dólares”, dijo el analista del Saxo Bank Ole Hansen.