Los costos de los préstamos en Alemania, el emisor de bonos de referencia de la zona del euro, se hundieron brevemente el lunes a su nivel más bajo en poco más de una semana, ya que los últimos datos de las economías más grandes del mundo proyectaron una sombra sobre las perspectivas de crecimiento.

La toma del poder por parte de los talibanes en Afganistán también apoyó los mercados de bonos, vistos como un refugio seguro en momentos de incertidumbre geopolítica. Los militantes entraron en la capital casi sin oposición el domingo mientras las naciones occidentales se apresuraban a evacuar a sus ciudadanos de un aeropuerto de Kabul cada vez más caótico.

Los datos mostraron que la producción de fábricas de China y el crecimiento de las ventas al por menor se desaceleraron drásticamente y no cumplieron las expectativas en julio, ya que los nuevos brotes e inundaciones de COVID-19 perturbaron la actividad.