Más de 2,200 diplomáticos y civiles han sido evacuados de Afganistán en vuelos militares, dijo un funcionario de seguridad occidental el miércoles, mientras los talibanes hacían los primeros esfuerzos para establecer un gobierno después de que su rayo arrasara la capital.

Los talibanes han dicho que quieren la paz, no se vengarán de los viejos enemigos y respetarán los derechos de las mujeres en el marco de la ley islámica. Pero miles de afganos, muchos de los cuales ayudaron a las fuerzas extranjeras dirigidas por Estados Unidos durante dos décadas, están desesperados por irse.

“Continuamos con un impulso muy rápido, la logística no muestra problemas técnicos a partir de ahora”, dijo el funcionario de seguridad occidental.

El funcionario dijo que los que salieron incluían personal diplomático, personal de seguridad extranjero y afganos que trabajaban para embajadas, pero no dio un desglose de cuántos afganos estaban entre las más de 2,200 personas que se fueron.