Los nuevos casos diarios de COVID-19 en Australia superaron los 1,000 el jueves por primera vez desde que comenzó la pandemia mundial, ya que dos hospitales importantes en Sydney establecieron tiendas de campaña de emergencia al aire libre para ayudar a lidiar con un aumento de pacientes.

Sydney, la ciudad más grande del país y el epicentro del brote actual, está luchando para erradicar un aumento en la variante Delta de rápida propagación, con infecciones diarias alcanzando niveles récord incluso después de dos meses bajo encierro.

El estado de Nueva Gales del Sur (NSW), donde Sydney es la capital, informó de 1,029 nuevos casos adquiridos localmente, superando el récord anterior de 919 un día antes. De los nuevos casos, 969 fueron detectados en el área metropolitana de Sydney, en comparación con 838.