La libra esterlina se mantuvo cerca de un mínimo de nueve meses el jueves en medio de preocupaciones sobre el crecimiento económico británico, y se espera que la inflación aumente a medida que el país lidia con una crisis de combustible.

La libra esterlina fue una de las monedas más fuertes del G10 este año, ya que los inversores apostaron a que la economía británica resurgiría más rápido de la pandemia gracias al rápido programa de vacunación de Gran Bretaña. Pero esa narrativa se ha desmoronado con la libra esterlina borrando todas sus fuertes ganancias de 2021, alrededor de ocho centavos menos desde su pico de junio.

Los datos que muestran que el producto interno bruto aumentó un 5,5% en el segundo trimestre, más de lo que se pensaba anteriormente, hicieron poco para animar a los inversores en libras esterlinas.