El viaje del Manchester United al Tottenham Hotspur el sábado fue anunciado como el último salón de oportunidad para el mánager del United, Ole Gunnar Solskjaer, pero resultó que era el número opuesto Nuno Espíritu Santo, que estaba siendo expulsado de las puertas batientes el lunes.

Antonio Conte, el ex entrenador de la Juventus y el Chelsea, que estaba, según algunos informes de los medios, a punto de tomar el relevo de Solskjaer en el United, ahora es el favorito para ser el nuevo jefe de los Spurs.

Solskjaer, que durante los días que se preparaban para el juego, había sido despedido por incapaz de formar un equipo, motivar a un equipo y tener las habilidades tácticas requeridas, alteró radicalmente la formación y el enfoque de su equipo y entregó una victoria narrativa por 3-0 en el norte de Londres.

Nuno es el segundo entrenador portugués en ser despedido este año por los Spurs después de que despidieran al tres veces ganador de la Premier League, José Mourinho, en abril. Para aliviar el dolor, ambos tendrán pagos guapos, negociados por el agente que comparten, Jorge Mendes.

Los días en que el fútbol inglés solía sacudir su cabeza colectiva ante los informes de que los gerentes de la Serie A o LaLiga fueron despedidos después de algunos malos resultados han desaparecido hace mucho tiempo. De hecho, cuando se trata de decisiones instintivas, histeria mediática y expectativas absurdas, la Premier League es ahora el líder mundial.

Los Spurs fueron terribles contra el United, pero hace solo dos meses que Nuno fue galardonado con el premio al entrenador del mes para agosto después de comenzar su tiempo en el club con tres victorias consecutivas.