Después de ocho años de investigación, un proyecto que busca reproducir los resultados de estudios clave de la biología del cáncer finalmente concluyó. Sus hallazgos sugieren, de la misma manera que la investigación en ciencia sociales, la investigación del cáncer tiene un problema de reproducibilidad.

Al iniciarse la pandemia de Covid-19 se observó también un incremento de trastornos alimenticios entre la gente joven. Algunos expertos relacionan este aumento con las interrupciones a la vida cotidiana, la angustia emocional y un mayor tiempo dedicado a las redes sociales, esto último asociado con una menor autoestima y una imagen corporal negativa. Un estudio reciente calculó un aumento de la incidencia de la anorexia nerviosa en niños y adolescentes canadienses, de 24.5 a 40.6 casos mensuales durante la primera ola de la pandemia. Según la información publicada en la revista JAMA Network Open, las hospitalizaciones por este trastorno alimenticio también aumentaron de 7.5 a 20 por mes y otros estudios más dan cuenta de un aumento similar en otros países.

Un estudio realizado por la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA) reveló que una combinación de la vacunación e infección adquirida naturalmente puede aumentar la producción de anticuerpos contra el SARS-CoV-2. Los hallazgos publicados en la revista científica mBio plantean la posibilidad de que los refuerzos de la vacuna puedan ser igual de efectivos para mejorar la capacidad de crear anticuerpos.

De acuerdo con una encuesta realizada por la consultora multinacional Ipsos y el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés), 78% de los empleados aceptarían la vacunación obligatoria en sus lugares de trabajo para continuar con sus labores. Las regiones donde existe la mayor aceptación de este protocolo sanitario obligatorio son Latinoamérica, Sudeste asiático, Asia Central, norte de Europa, Arabia saudita, y Estados Unidos. Agregaron que México se encuentra entre los 15 países con mayor educación sanitaria y conocimiento de las vacunas.