La noche de ayer, el presidente Biden presentó a los ciudadanos estadounidenses y al mundo entero el “Estado de la Unión”; se trata del informe de resultados del año anterior de su gestión, así como del planteamiento de los objetivos para los siguientes doce meses.

En esta ocasión, el presidente Biden tuvo que informar sobre la delicada situación en Ucrania y lo que se anticipa que será la guerra más grande en Europa, desde la Segunda Guerra Mundial.

Desde el inicio de la agresión del gobierno de Putin, Joe Biden implementó sanciones económicas que han puesto en jaque a las finanzas rusas; además, ha enviado armas defensivas y destinó 600 millones de dólares más. Además, la Casa Blanca adelantó la posición de esta administración invitando al palco de la primera dama a la embajadora de Ucrania, Oksana Markarova, quien recibió un largo y cálido aplauso.

Sin embargo, en opinión del presidente Zelenski esto no ha sido suficiente. Horas antes de la cita en el Capitolio, el presidente de Ucrania dijo a CNN que: “Es importante que la gente entienda que, aunque la guerra esté ocurriendo en Ucrania, la batalla es esencialmente por los valores en la vida… por la democracia y la libertad”. En ese sentido, Zelenski pidió apoyo en armas de defensa y fuerza aérea para resistir al embate ruso.

En cuanto a Putin, Biden dijo que: “Cuando los dictadores no pagan un precio por su agresión, causan más caos. Siguen moviéndose. Y los costos y amenazas para EU y el mundo siguen elevándose. Putin se equivocó, pensó que nos dividiría y nos encontró unidos”.

Además, anunció: “El Departamento de Justicia de EU está reuniendo un grupo de trabajo dedicado para perseguir los crímenes de los oligarcas rusos. Nos unimos a nuestros aliados europeos para encontrar y confiscar sus yates, sus apartamentos de lujo, sus jets privados. Venimos por sus ganancias mal habidas”.

Biden ofreció apoyo a los ucranianos en su lucha por la libertad, mediante apoyo militar, económico y humanitario. Insistió en las alianzas con treinta países para hacer frente a los ataques rusos.

En temas internos, insistió sobre el avance en la pandemia y la recuperación de la economía mediante la creación de trabajo y reforzamiento de la clase media. Además, exaltó el orgullo americano invitando al consumo interno y al reforzamiento de los derechos sociales: reducción de los precios de las medicinas, limitando el costo del sistema de cuidados infantiles. Es la mejor estrategia tras la pandemia y frente a la guerra.

El Estado de la Unión de ayer fue, sin duda, uno de los más importantes que escucharemos. Fue bitácora e itinerario sobre la guerra entre Ucrania y Rusia, así como una expresión del liderazgo de Biden de cara a las elecciones intermedias y, eventualmente, hacia un segundo periodo.