Una decisión sorpresa de la boy band surcoreana BTS de tomar un descanso de los espectáculos en vivo ha reavivado el debate sobre el servicio militar obligatorio en un país que establece tendencias globales de la cultura pop mientras se enfrenta a una amenaza de décadas de la Guerra Fría.

El servicio militar es enormemente polémico en Corea del Sur, donde todos los hombres sanos de entre 18 y 28 años están destinados a servir durante unos dos años como parte de los esfuerzos para defenderse de una Corea del Norte hostil.

A lo largo de los años, categorías particulares de hombres han ganado exenciones, ya sea a las que se les permite posponer el servicio durante un cierto tiempo o se les permite hacer un servicio más corto, incluidos los hombres que ganan una medalla en los Juegos Olímpicos o Asiáticos y los músicos y bailarines clásicos que ganan un premio mayor en ciertas competiciones.

En virtud de una revisión de la ley en 2019, a las estrellas del K-pop reconocidas mundialmente se les permitió posponer su servicio hasta la edad de 30 años.