El presidente Vladimir Putin dijo que Moscú estaba listo para vender armas avanzadas a aliados de todo el mundo y cooperar en el desarrollo de tecnología militar, casi seis meses después de la guerra de Ucrania en la que su ejército ha tenido un peor desempeño de lo esperado.
Con las fuerzas del líder ruso repelidas de las dos ciudades más grandes de Ucrania y avanzando lentamente, a un alto costo, en el este del país, hasta ahora la guerra no ha demostrado ser un escaparate convincente para la industria armamentística rusa.
Pero el líder del Kremlin, dirigiéndose a un espectáculo de armas fuera de Moscú, insistió en que el armamento ruso estaba años por delante de la competencia.