Kim Kardashian ha promovido todo, desde piruletas que suprimen el apetito hasta licor con sabor a melón y papel higiénico, pero fue su incursión en el turbio mundo de las criptomonedas lo que la metió en el agua caliente.
La estrella de la televisión de realidad y la influencer ha acordado liquidar los cargos de promocionar ilegalmente una seguridad criptográfica y pagar 1,26 millones de dólares en multas y tarifas, dijo la Comisión de Bolsa y Valores.
Kardashian, que tiene 330 millones de seguidores en Instagram y 73.7 millones de seguidores en Twitter, no reveló que la compañía criptográfica EthereumMax le pagó 250.000 dólares para publicar una publicación de Instagram sobre sus tokens EMAX, dijo la SEC.
La SEC en noviembre de 2017 advirtió a las celebridades que buscan sacar provecho del espacio emergente de activos digitales que las reglas de EE. UU. requieren que revelen cuando se les paga para respaldar los tokens criptográficos.