Por José Rivero, Country Manager de Infor México
Las empresas actuales son expertas en el cambio, ya que es fundamental para sobrevivir. La innovación, modernización y mejora continua de los procesos operacionales son factores indispensables en el mundo complejo actual. No importa si la empresa manufactura partes automotrices, maquinaria industrial, alimentos o muebles, deben estar al día con las tendencias, retos y sobre todo adaptarse. Las nuevas estrategias y acciones deben estar sincronizadas, así como alinearse y exceder las expectativas de los clientes. No es una tarea fácil y muchas organizaciones luchan para buscar su punto de arranque para la digitalización.
En la medida que se busca el punto de inicio, las empresas deben parar y plantear tres preguntas antes de empezar este recorrido, afirma Infor.
1. ¿Está la empresa preparada organizacionalmente para un cambio tan considerable?
Las organizaciones son tan buenas como su gente y deben evaluar cuidadosamente si cuentan con el personal y la cultura adecuada para una nueva forma de hacer las cosas. Las personas son las que serán las responsables de implementar el cambio, por lo que deben estar listas, comprometidas y convencidas con el plan de transformación.
La cultura organizacional puede marcar el fracaso o éxito del proyecto de transformación digital y la gestión del cambio organizacional es uno de los componentes claves para dicho proyecto. Las organizaciones deben generar una cultura inclusiva donde el personal sienta que es parte clave para contribuir con el éxito de la empresa.
Para lograr esto, los equipos de gestión deben incentivar una cultura de apertura que ayude a los empleados a compartir sus ideas. Todos los cambios y las transformaciones comienzan con una idea, por lo que es importante que el personal se sienta empoderado y comparta sus ideas y opiniones.
2. ¿Qué esperamos conseguir y cuáles serían los resultados?
Lograr proyectos exitosos de transformación digital es difícil, y si las organizaciones no tienen claro el objetivo las posibilidades de éxito son mínimas. Las compañías deben invertir tiempo y esfuerzo para entender exactamente qué quieren lograr con la digitalización. Se deben preguntar lo siguiente: ¿qué hace falta cambiar? ¿Por qué se necesita el cambio? ¿Cuál será el impacto?
Las ideas de las organizaciones caen en cuatros categorías: alineamiento con los clientes, productividad de los empleados, visibilidad de la cadena de suministro o eficiencia operacional.
· Clientes. Las empresas deben plantearse si están transformando la forma de conexión y relación con los clientes, si desean ofrecer algún nuevo producto, aumentar el nivel de servicios o usar los datos para crear un nuevo flujo de facturación.
· Empleados. Las organizaciones deben preguntarse si las funcionalidades que brindan, ayudan al compromiso del personal y como las soluciones digitales ayudan a mejorar la productividad, mejorar la toma de decisiones y a eliminar cuellos de botella en los procesos.
· Cadenas de Suministro. Las compañías deben evaluar si están simplificando las cadenas de suministro complejas y aumentando la visibilidad para anticipar problemáticas y resolver proactivamente problemas potenciales.
· Operaciones. Al estimar la eficiencia operacional, las empresas se benefician preguntándose si pueden optimizar la forma en que operan y si cuentan con la tecnología adecuada para lograr eficiencia en los procesos, para predecir problemáticas y decidir la mejor acción a seguir.
3. ¿Es nuestro sistema apto para la digitalización?
Antes de comenzar el proyecto de transformación digital, los sistemas de la organización deben ser aptos digitales y sumamente flexibles. Idealmente, la organización debe contar con un ecosistema donde el personal acceda a su trabajo, a los datos y procesos sin barreras en cualquier momento y desde cualquier lugar. Tener las soluciones en la nube es la mejor manera, afirma Infor.
También las empresas se benefician con soluciones especialmente desarrolladas para su industria con funcionalidades específicas para cada sector. Las aplicaciones modificadas complican las actualizaciones y la modernización, introduciendo riesgos y dificultando la adopción de soluciones digitales avanzadas.
Idealmente, los sistemas punta a punta de la empresa, deberían funcionar sobre una plataforma digital común que brinda funcionalidades modernas integradas como Internet de las cosas (IoT), inteligencia artificial (IA), machine learning (ML), big data, movilidad, y análisis predictivo.
El entorno tecnológico de las empresas debe soportar el concepto de hiper conectividad, no simplemente conectar aplicaciones, sino conectar a todos: gente, aplicaciones, dispositivos, datos y proveedores, concluye Infor