Foxconn de Taiwán, el mayor fabricante de iPhones de Apple Inc, dijo el lunes que estaba trabajando para reanudar la producción completa en una planta importante en Zhengzhou, China, lo antes posible que ha sido afectada por las restricciones de COVID-19, y revisó sus perspectivas del cuarto trimestre.

China ordenó un parque industrial que alberga una fábrica de iPhone perteneciente a Foxconn para entrar en un confinamiento de siete días el miércoles, en una medida que se establece para intensificar la presión sobre el proveedor de Apple mientras se esfuerza por sofocar el descontento de los trabajadores en la base.

La Zona Económica del Aeropuerto de Zhengzhou en el centro de China dijo que impondría medidas de “gestión silenciaria” con efecto inmediato, incluida la impida a todos los residentes salir y solo permitir vehículos aprobados en las carreteras dentro de esa área.

Foxconn, el mayor fabricante de electrónica por contrato del mundo, dijo en un comunicado que el gobierno provincial en Henan, donde se encuentra Zhengzhou, “ha dejado claro que, como siempre, apoyará plenamente a Foxconn en Henan”.