En lugar de los tradicionales escritorios, sillas y computadoras, empleados de Twitter en San Francisco encontraron camas, lámparas, mesitas de noche, sillones y alfombras en algunas oficinas, según reportó Forbes. De acuerdo con el medio económico, un informante dijo que se instalaron entre cuatro y ocho dormitorios por piso para permitir a los trabajadores con turnos hardcore descansar.

La decisión de Elon Musk de convertir las salas de juntas en dormitorios no fue anunciada, ni discutida con los trabajadores de forma oficial. Por ello, varios empleados han expresado su descontento con la medida implementada por el magnate.

Después de que Musk asumiera la dirección de Twitter, anunció a los trabajadores que podían irse o quedarse. Sin embargo, señaló si decidían quedarse debían de trabajar con la condición de trabajar intensamente en Twitter 2.0.

Musk, en la mira de las autoridades

Tras la difusión de las nuevos dormitorios en la sede de San Francisco, el Departamento de Inspectores de Edificios de la demarcación anunció que abriría una investigación. De acuerdo con las autoridades, estas deben asegurarse de que sean utilizadas como corresponden.

Como respuesta, el también dueño de Tesla aseguró que la ciudad de San Francisco ataca sus compañías que dan camas para sus empleados “cansados”. Asimismo, arremetió criticando a la administración por no garantizar la seguridad de los niños ante la amenaza del fentanilo.

¿Dormir en la oficina?

El periodista de la agencia Agence France Presse (AFP), Bhim Suwastoyo, se hizo famoso en la década de los 90s por dormir a ratos en un armario de su oficina. De acuerdo con Suwastoyo, tener una cama en su oficina le fue útil en el momento más importante de la crisis monetaria asiática de 1997.

De acuerdo con The Better Sleep Council, 87 por ciento de las personas que toman una siesta durante el día se siente con más energía al despertar. Asimismo, el desarrollo cognitivo y de habilidades para recordar mejoran al momento de dormir y se reduce la frustración.

Para tener una buena siesta en el trabajo es necesario que dure menos de 29 minutos, pues si dura más puede alterar el ciclo de sueño nocturno. En ese sentido, el mejor tiempo para dormir es de 15 a 20 minutos y podría hacerse alrededor de las 14:00.