La bancada de Morena de la Cámara de Diputados impulsó una propuesta para aumentar la multa relativa a “injurias al presidente de la República” contenidas en la Ley sobre Delitos de Imprenta. Tras el anuncio de la reforma, el mandatario Andrés Manuel López Obrador expresó su rechazo y aseguró que vetaría la modificación.

En la Comisión de Gobernación y Población se modificaron diversos montos de multa establecidos en dicha ley para ajustar las cantidades de pesos a Unidades de Medida y Actualización (UMA). De esa manera, la penalización por injurias al mandatario del país en medios impresos podría ir de las 10 a 40 UMA, es decir de mil 37 pesos a los cuatro mil con la unidad de 2023. Actualmente, la ley establece una sanción de cien a mil pesos o un arresto de seis mesas a año y medio.

Asimismo, se impondría la misma sanción para las ofensas a ministros de la Suprema Corte, magistrados de circuito, jueces de distrito o del orden común. También la ley señala que las injurias a miembros del Poder Legislativo, a generales o coroneles también serán merecedoras de una multa.

Fue la diputada morenista por Zacatecas, Bennelly Hernández Ruedas, quien estuvo detrás de la reforma. Durante la gestión de Ricardo Monreal en la alcaldía Cuauhtémoc fue directora general de Desarrollo Social entre 2015 y 2018.

De acuerdo con Hernández Ruedas, el objetivo de la iniciativa es actualizar la reglamentación fundamental, pues se ha vuelto obsoleta. La diputada declaró que las sanciones son mínimas, por lo cual dan pauta a que se sigan cometiendo injurias o delitos contra funcionarios públicos.

Sin embargo, durante la conferencia matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador, aseguró que esa reforma “no tiene nada que ver con nosotros”. En ese sentido, aseguró que no se va a enjuiciar a nadie y la ley será derogada por él para proteger la libertad de expresión.

López Obrador señaló que la reforma no pasó al pleno, por lo cual no se va a enjuiciar a nadie.

Personajes que han sido enjuiciados por decir ‘injurias’ del presidente

Francisco I Madero fue enjuiciado en 1910 por supuestos discursos de campaña en los cuales insultaba a la autoridad en la figura del presidente y conato de rebelión. Las versiones falseadas de los discursos señalaban que llamó a Porfirio Díaz tirano e invitó a sus seguidores a defender con la propia vida el proceso electoral. Asimismo, durante el movimiento estudiantil de 1968, muchos de los detenidos fueron señalados por injurias de la investidura del presidente.

Durante la historia de México y del mundo, miles de personas opositoras al gobierno en turno han sido detenidas por faltarle el respeto al jefe del ejecutivo.

Por su parte, el mandatario señaló que está analizando si demanda al abogado de Genaro García Luna por daño moral. Durante el juicio, que se realizó en un tribunal de Nueva York, Cesar de Castro intentó involucrarlo en la cadena de sobornos del Cártel de Sinaloa.