Los Diablos Rojos del México, uno de los equipos más emblemáticos del béisbol profesional en México, están cerca de dar un paso histórico al convertirse en una de las primeras franquicias deportivas en cotizar en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV).
La acaudalada familia Harp, propietaria del equipo, busca capitalizar el éxito reciente de la organización tanto en el terreno deportivo como en el ámbito comercial, aprovechando la notable transformación de su modelo de negocio en los últimos años.
Tras un periodo en el que las gradas vacías del Foro Sol eran una constante, los Diablos Rojos han consolidado una base de aficionados en su moderno Estadio Alfredo Harp Helú, convirtiéndose en un modelo exitoso de entretenimiento deportivo. Ahora, la franquicia podría ser pionera en utilizar el nuevo esquema de listado simplificado, establecido tras la reciente reforma a la Ley del Mercado de Valores, que facilita el acceso de empresas al mercado bursátil sin necesidad de una oferta pública inicial.
De acuerdo con los documentos publicados por la BMV, los Diablos Rojos planean listar un total de 624,000 acciones con un valor nominal teórico de 1,000 pesos por acción, lo que llevaría su capital social a 624 millones de pesos (aproximadamente 30 millones de dólares). Sin embargo, el precio de cotización inicial será determinado mediante subasta, conforme a las regulaciones de la bolsa, por lo que no puede ser establecido de antemano.
El debut en la BMV está programado para concretarse antes de que termine 2024, marcando un hito para el béisbol profesional mexicano y el sector deportivo en general.
Un negocio sólido y atractivo
En su prospecto de listado, los Diablos Rojos se posicionaron como el equipo más exitoso en la historia del béisbol profesional en México, destacando por:
- Campeonatos: Son el equipo más ganador del circuito con casi 100 años de historia.
- Asistencia y popularidad: Lideran en asistencia en los estadios donde juegan.
- Audiencias televisivas: Son el equipo más cotizado por las televisoras, gracias al interés que generan entre los fanáticos.
La decisión de listar al equipo en la BMV representa no solo un movimiento financiero estratégico, sino también un reconocimiento al potencial económico del deporte en México, abriendo camino para que otras franquicias deportivas exploren la posibilidad de financiarse en el mercado bursátil.
Con este paso, los Diablos Rojos del México buscan consolidar su legado no solo en el béisbol mexicano, sino también como un referente de innovación en la gestión deportiva.