La Comisión de Puntos Constitucionales e Iniciativas Ciudadanas del Congreso de la Ciudad de México aprobó este viernes, por unanimidad, un dictamen que propone modificaciones a la Ley de Protección y Bienestar
Animal para permitir la celebración de espectáculos taurinos sin la matanza del animal y sin el uso de objetos punzocortantes. Con nueve votos a favor, cero en contra y ninguna abstención, la iniciativa avanzará ahora al Pleno del Congreso, donde será discutida el martes 18 de marzo.
Esta iniciativa, impulsada por la Jefa de Gobierno, Clara Brugada, busca reformar la regulación de la tauromaquia en la capital del país, permitiendo que se realicen corridas de toros, novilladas, becerradas, rejoneo y tientas sin que los toros sean sacrificados o sufran heridas por objetos punzocortantes.
De este modo, se plantea una transformación en la Fiesta Brava, eliminando la violencia contra los animales y adaptándola a un nuevo modelo más acorde con el bienestar animal.
El dictamen aprobado establece que estos eventos taurinos deberán llevarse a cabo bajo condiciones específicas que garanticen la integridad de los toros, sin el uso de espadas, banderillas o cualquier otro elemento que les cause daño.
Esta medida ha sido respaldada por diversas organizaciones de protección animal y por sectores de la sociedad que abogan por la erradicación del sufrimiento en espectáculos públicos.
Reacciones y contexto
La iniciativa surge en un contexto de creciente debate sobre la tauromaquia en México. Mientras algunos grupos defienden su abolición total, otros sectores buscan mantenerla como parte de la tradición y el patrimonio cultural del país, pero con modificaciones que eviten el sufrimiento de los animales.
El dictamen aprobado en comisiones refleja un consenso entre fuerzas políticas, sociedad civil y el gobierno capitalino, consolidando a la Ciudad de México como un referente en la protección de los derechos de los animales.
En los últimos años, varias entidades del país han prohibido o restringido la tauromaquia, y esta reforma se alinea con una tendencia global de modificación de estos espectáculos.
Próximos pasos
El siguiente paso será la discusión y votación en el Pleno del Congreso de la Ciudad de México, donde, de ser aprobado, el dictamen se convertiría en una nueva normativa de la Ley de Protección y Bienestar Animal de la capital.
Este avance podría marcar un hito en la historia de la tauromaquia en México, estableciendo un modelo que equilibre la continuidad de esta práctica con la protección de los animales, evitando el sufrimiento y promoviendo alternativas más éticas en la realización de estos eventos.