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Número de placa en casco de motociclistas podría prevenir robos

El diputado del Partido Revolucionario Institucional (PRI) Benjamín Medrano Quezada, propone establecer como una obligación de los motociclistas el uso de cascos rotulados con el número de placa asignada, para ayudar a tener un control y prevenir robos.

La Comisión de Transportes analiza reformas al artículos 74 Bis de la Ley de Caminos, Puentes y Autotransporte Federal, para establecer esta iniciativa

De acuerdo con el legislador Medrano Quezada, se reconoce el crecimiento del número de motocicletas en el país, así como sus consecuencias perniciosas, las cuales van desde la falta de respeto a las normas a situaciones relacionadas con actividades de grupos delincuenciales.

En 1980 había 277 mil 84 motocicletas registradas; para 2012, esta cifra se elevó a un millón 581 mil 725 unidades, un incremento de cerca de 400 por ciento, gracias a que es un vehículo relativamente barato en precio y costo de mantenimiento.

Refiere que con este aumento de motociclistas, se observan faltas de conductores, pues circulan por vías cuyo acceso les está prohibido, como en los carriles centrales de los periféricos o las ciclovías, o avanzan entre carriles, van a exceso de velocidad y se estacionan en banquetas o espacios para discapacitados.

El robo de motocicletas se ha incrementado durante los últimos años y de ello dan constancia algunos funcionarios del gobierno de la Ciudad México, quienes reconocen que tan sólo durante el primer cuatrimestre del 2016 fueron sustraídas 613 motocicletas, lo que hace un promedio diario de 5.11 unidades.

“Si bien debemos reconocer que la enorme mayoría de los motociclistas son ciudadanos respetuosos de la ley, no debemos ignorar que una minoría ha venido a trastocar la sana convivencia con conductores de automotores, por lo que se deben establecer normas dirigidas en un ámbito en el que, hasta ahora, se carece de él, como lo es la circulación en carreteras federales”, señala el diputado priista en un comunicado.

Con la iniciativa, los motociclistas deberían tener membretado, en la parte posterior externa de los cascos, el número de la placa asignada, en letras y números tipo arial, reflejantes, cuyo tamaño sea de 3.5 centímetros de alto y un ancho de trazo de un centímetro.

Argumenta que aunque el Reglamento de Tránsito en Carreteras y Puentes de Jurisdicción Federal, establece como una obligación el uso de estos aditamentos de seguridad, dicho ordenamiento no contiene el imperativo de incorporar el número de placa al casco.

ntx/jcd

¿Cuál es la clave para la detección del cáncer de mama?

México tiene que transitar hacia una mayor cultura de prevención y conocimiento para atender el cáncer de mama, a fin de aprovechar de una forma plena todas las recomendaciones señaladas en la NOM 041-SSA2-2011.

La investigadora Karla Unger señaló lo anterior al presentar el estudio “Percepciones de personal de salud y experiencias de pacientes con cáncer de mama respecto a los principales servicios descritos en la Norma Oficial Mexicana 041″.

En el marco de un foro organizado por el Club de Industriales, la catedrática del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) reveló que esa norma establece una serie de recomendaciones de gran valor para la atención oportuna de esta enfermedad.

Sin embargo, advirtió que al hacer el estudio se identificaron muchas áreas de oportunidad para mejorar la atención que se brinda en los centros oncológicos públicos disponibles para población no derechohabiente del Seguro Social.

Ello, cobra importancia si se considera que al año en México se detectan hasta 20 mil nuevos casos de cáncer de mama, siendo esta la principal causa de muerte en este sector poblacional.

Explicó que de acuerdo con la última cifra de 2015, se registraron hasta seis mil 500 muertes al año por este padecimiento, pero las cifras no son muy fiables ya que no existe un registro nacional, de ahí que uno de los objetivos de este estudio sea plantear la formación de uno.

Ese registro nacional permitiría dar un paso más a la atención oportuna de este mal, ya que México se encuentra en un nivel medio en ese sentido, pues casi la mitad de los casos se detectan en etapa tres o cuatro y la otra mitad en la uno y dos.

Al respecto, el director General del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), Abelardo Meneses García, advirtió que es indispensable cambiar este paradigma, ya que en México 70 por ciento de las pacientes “llegan en etapas avanzadas”, por lo que tenemos que transitar hacia un diagnóstico anticipado.

En ese sentido, el director del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la Secretaría de Salud, Rufino Luna Gordillo, reconoció el avance que representó para México la definición de la NOM 041.

“Ya no sólo se habla de cobertura, sino de la oportunidad con la que se atiende este cáncer” pues hoy en día se ha logrado reducir el tiempo entre la detección y la atención de 308 días hace una década a 32 días en 2016″.

Ante ello, la fundacion Cimab determinó apoyar con una investigación aplicada a 13 centros oncológicos y que permitieron detectar una serie de problemas a superar para poder sacar más provecho de la NOM 041, agregó Karla Unger.

Para ello, la investigadora consideró necesario fortalecer la capacidad operativa de los centros, con mejor equipamiento, y mantenimiento de los mismos con personal capacitado, ya que hoy en día uno de los problemas no es la falta de tecnología sino de quién la maneje y mantenga.

Además, recomendó garantizar el uso adecuado de los recursos económicos derivados del Fondo de Protección para Gastos Catastróficos, para enfocar de manera adecuada esos recursos a la atención de este padecimiento.

Es indispensable también más divulgación de las recomendaciones de la NOM 041, tanto en personal de salud especializada de estos centros oncológicos, como del personal de primero y segundo nivel de atención.

Añadió que es importante empoderar a las pacientes para fomentar la corresponsabilidad en la mejoría de los procesos de atención oncológica.

ntx/jcd

Polipíldora, tratamiento que previene infartos

La polipíldora es un eficaz método para prevenir infartos, pues en una sola pastilla, los pacientes que ya han sufrido alguno o que están en riesgo tienen el tratamiento completo que pueden seguir con facilidad, destacó el especialista José María Castellano Vázquez.

De acuerdo con el coordinador de Ensayos Clínicos del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) de Barcelona, España, la adherencia al tratamiento médico en pacientes que ya han tenido un infarto disminuye hasta 30 por ciento la probabilidad de un nuevo evento cardíaco, de accidente cerebrovascular y por supuesto de muerte.

Destacó la efectividad de la polipíldora para prevenir un accidente cardiovascular secundario, e incluso se emplea como terapia para prevenir un primer infarto en pacientes de alto riesgo porque ya padecen diabetes, hipertensión u obesidad.

La polipíldora combina tres medicamentos en una sola toma: el ácido acetilsalicílico, la estatina y un anticoagulante. Sin el tratamiento adecuado, las personas que han sufrido un infarto tienen seis veces más posibilidades de morir por un segundo evento cardiovascular en comparación con las personas sanas.

Después de un infarto, la mitad de los pacientes abandona el tratamiento a los seis meses, sin embargo, con la polipíldora la adherencia a la toma de los medicamentos aumenta hasta 70 por ciento, porque una cápsula combina los medicamentos que deben tomar.

“La polipíldora es una solución porque mejora el acceso al tratamiento en países en desarrollo, donde se produce 80 por ciento de las muertes por enfermedad cardiovascular, y hemos visto en tres estudios que es la mejor estrategia que aumenta la adherencia en pacientes que han tenido un infarto”, destacó.

José María Castellano resaltó que México fue el primer país en América Latina en introducir la polipíldora tanto en el sector privado como en el público.

NTX/JCD

IMSS anuncia nuevo modelo para prevenir enfermedades crónicas

Con una inversión inicial de 15 millones de pesos y con un plan piloto que comenzó en Nuevo León, Mikel Arriola Peñalosa, director general del IMSS, presentó un modelo de atención que va de lo preventivo a lo curativo el cual busca evitar el crecimiento de diabetes, enfermedades cardiovasculares, cáncer de próstata y de mama, que son las cuatro principales causas de muerte en el país, y que representan un gasto de 80 mil millones de pesos anuales para el instituto.

En el Auditorio Juan Moisés Calleja, el director general del Seguro Social, explicó que ante una problemática que se ha convertido en emergencia epidemiológica, este modelo desplegará brigadas médicas y creará nuevos consultorios de medicina preventiva que estarán apoyados por una Unidad de Inteligencia Preventiva y un tablero electrónico de seguimiento que permitirá atender mejor a los derechohabientes.

Las brigadas médicas estarán coordinadas con las empresas, sindicatos y derechohabientes, se recorrerán los centros de trabajo, escuelas, comunidades y todos los sitios en donde se requiera el nuevo modelo preventivo.

La Unidad de Inteligencia Preventiva será el cerebro de la nueva estrategia que aplicará el IMSS y se apoyará en el uso de tecnología a través de un tablero electrónico que permitirá monitorear y analizar la información recabada por las brigadas, para estratiȨcar a la población y definir acciones.

Arriola Peñalosa señaló que se eligió Nuevo León para aplicar el plan piloto porque esta entidad reúne las características de infraestructura médica, laboral y de información de la derechohabiencia para iniciar con las acciones preventivas de inmediato.

MiHeL