Ante la aplicación de controles biométricos que entrarán en vigor en marzo próximo en las instituciones bancarias, especialistas recomiendan un uso transparente y cuidadoso de los datos personales de los usuarios.
“Las corporaciones o gobiernos que hicieran uso de huellas biométricas deben usarlas de forma respetuosa, informando oportunamente el motivo de su uso y eliminando la huella si la persona lo desea. Las leyes y regulaciones deben permitir que el usuario pueda ver de forma transparente cómo se está utilizando los biométricos que se obtiene de ellos”, detalló la firma especializada en inteligencia empresarial SAS.
En su opinión, los usuarios deben informarse y entender cómo están utilizando esta información y verificar, por ejemplo, a qué empresa u organización ceden datos tan sensibles como la huella digital.
Los bancos que operan en México estarán obligados por ley a capturar huellas digitales de sus usuarios en la apertura de cuentas en sus sucursales, las cuales serán cotejadas con la base de datos del Instituto Nacional Electoral (INE) para corroborar que la información del cliente sea verídica y se eviten fraudes como la usurpación de identidad.
La semana pasada, EL UNIVERSAL publicó los avances de las principales instituciones bancarias en la adopción de controles biométricos, en el que firmas como CitiBanamex, HSBC o Banregio se declaran listas para la aplicación de esta tecnología en sus sucursales.
El robo de identidad es un delito que ha mantenido una tendencia al alza en los años recientes.
Al primer semestre de 2019, este fraude contabilizó 45 mil 539 quejas en operaciones bancarias, con un total reclamado por los clientes afectados por 627 millones 645 mil pesos, de acuerdo con la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de los Servicios Financieros (Condusef).
Según la firma SAS, en términos generales, los biométricos ofrecen buenos niveles de seguridad, ya que en casos de pérdida o robo de una tarjeta de crédito, si hubiese un segundo factor de autenticación biométrico como el reconocimiento facial, el defraudador no puede forzar el sistema manteniendo seguro el dinero del propietario del plástico.
“Otra razón importante para el uso de la seguridad a través de la biometría es la transformación digital en el futuro, ya que más adelante es posible que al incrementarse el nivel de digitalización en diferentes áreas, incluso las tarjetas de crédito dejen de existir para dar lugar a transacciones a través de alguna huella biométrica como el reconocimiento facial”, expuso la empresa.
“En algunos países como China por ejemplo, ya puedes sacar dinero del cajero o pagar tu almuerzo sólo sonriendo a la cámara”, ejemplificó la empresa especializada.
Con información de EL UNIVERSAL