Las acciones europeas se prepararon para su peor sesión en más de un año el viernes, ya que los informes de una variante de coronavirus recién identificada y posiblemente resistente a las vacunas avivaron los temores de un nuevo golpe en la economía global y expulsaron a los inversores de activos más riesgosos.

El índice de referencia STOXX 600 bajó un 2.5%. Había deslizado hasta un 3.6% en el comercio temprano, mientras que el indicador de volatilidad para el principal mercado de valores alcanzó su punto más alto en casi 10 meses.

Poco se sabe de la variante detectada en Sudáfrica, Botswana y Hong Kong, pero los científicos dijeron que tiene una combinación inusual de mutaciones y puede ser capaz de evadir las respuestas inmunitarias o hacerla más transmisible.