Moscú.- Con enjundia, pero sobre todo con corazón, la selección de Croacia hizo historia y clasificó a su primera final de Copa del Mundo al vencer 2-1 a Inglaterra, en semifinal que se definió en tiempos extra.

En el Estadio Luzhniki, Kieran Trippier, al minuto cinco, adelantó a los ingleses, pero en el segundo lapso, al 68´, Ivan Perisic, consiguió la igualada que obligó a jugarse media hora más de partido.

En el segundo tiempo extra, el atacante Mario Mandzukic, al minuto 109, le dio la victoria a los croatas en este Mundial de Rusia 2018 para instalarse en la final, donde el domingo buscará agrandar su historia y ganar el título contra Francia.

Los creadores del futbol se quedaron en la orilla de llegar a su segunda final de Copa del Mundo contra un equipo balcánico, que desde las entrañas sacó el coraje, lo que no hacían las piernas lo hizo el sentimiento.

No importó que Croacia traía más recorrido en Rusia 2018, pues eliminó a Dinamarca y Rusia en tanda de penales, un cansancio que en el primer tiempo se notó y todo empeoró cuando Inglaterra se adelantó en su primera jugada con el 1-0 de tiro libre ejecutado por Trippier.

Además de esa situación adversa, el equipo de “Los Tres Leones” era mejor en el encuentro, desconectó a los mejores hombres croatas, Ivan Rakitic y Luka Modric, pero desaprovechó su momento y al final lo pagó.

El goleador del Mundial, Harry Kane, perdonó el segundo tanto inglés primero por la atajada de Danijel Subasic y luego en el rebote estrelló el balón al poste, una falla grave para un delantero de su calidad cuando más lo necesitaba su equipo.

Después de ser indultado, Croacia se acordó de jugar, Modric, Rakitic, Rebic y Perisic se juntaron y poco a poco borraron del terreno de juego a su rival. Los croatas se soltaron, se sintieron cómodos y en el segundo tiempo fueron dominadores.

El 1-1 croata llegó en un gran centro por derecha de Sime Vrsaljko y Perisic se adelantó a dos marcadores para firmar el empate, una muestra de no dar nada por perdido. Un gol que aumentó las ilusiones de un pequeño país de poco más de cuatro millones de habitantes.

Instantes más tarde, el propio Perisic pudo ser la figura total, pero su remate pegó en el poste en una jugada donde Inglaterra comenzó a dar síntomas de distracción, se desconectó y así lo reflejaron el portero Jordan Pickford y sus defensores cada vez más nerviosos.

Croacia ya no quería saber siquiera de los tiempos extra y mucho menos de los penales, pero Mandzukic y Perisic fallaron en el cierre del tiempo reglamentario, donde Pickford comenzó a ser figura en el cuadro británico.

Parecía que en la prórroga Inglaterra despertaría, pero todo quedó en un intento y se agarró de las jugadas a balón parado, táctica que varios goles le permitió en este Mundial, así John Stones estuvo a nada del gol con cabezazo, pero en la línea sacó Vrsaljko.

Luego, Mandzukic vio cómo su remate a bocajarro fue desviado por Pickford y el delantero de la Juventus quedó tendido, se preveía que no seguiría, sin embargo, nadie quiere perderse una semifinal.

El goleador croata continuó en el juego y fue factor al anotar el 2-1 para los suyos que acabó con las ilusiones de Inglaterra, que jugó con 10 porque a Trippier no le aguantaron las piernas en los últimos minutos, y evitó que los balcánicos jugaran su tercera ronda de penales.

De este modo, con un equipo de respeto, Croacia hizo historia y ahora chocará contra Francia en busca de su primer título Mundial, mientras que los ingleses pelearán por el premio de consolación, el tercer lugar ante Bélgica.

El árbitro del encuentro fue el turco Cuneyt Cakir, quien cumplió con su labor y amonestó a los croatas Mario Mandzukic y Ante Rebic, así como al inglés Kyle Walker.

NTX