No cabe duda que hoy en día la comunicación ha ido evolucionado a pasos gigantescos. Si conseguimos en este momento el ‘mejor’ smartphone en el mercado, en menos de un año, ya habría otro con ‘nuevas funciones integradas’.
Sin embargo, a nadie le queda duda que el tener un teléfono inteligente ha facilitado la vida, en todo sentido. Pasamos de su función básica (hacer y recibir llamadas) a tener acceso a herramientas como la cámara, mapas, correo electrónico y por supuesto, redes sociales. Pero por supuesto todo tiene un precio, ¿qué estamos pagando por esa “necesidad”?
De acuerdo con la organización ambientalista, Greenpeace desde el lanzamiento del primer iPhone en 2007 -fecha que se considera el inicio de los smartphones- se han fabricado 7 mil 100 millones de dispositivos, que si todos funcionaran en la actualidad, serían suficientes como para que todos los habitantes del planeta tuvieran el acceso a uno.
El consumidor en los Estados Unidos usa en promedio por poco más de dos años su teléfono, esto causa un ritmo acelerado de producción que ha provocado una mayor demanda de recursos naturales como son aluminio, cobalto y oro, que además de dejar tierras inservibles, ponen en riesgo la salud de los trabajadores, principalmente en países como China y México donde se manejan peligrosas sustancias químicas.
Por otra parte, la forma en la que están diseñados los smartphones dificulta su desmontaje, por lo tanto suelen ser triturados y enviados a la fundición cuando “se reciclan”. Tan sólo en 2014, se generaron 42 millones de toneladas métricas de desechos electrónicos, tres de las cuales eras residuos de pequeños productos de TI como los teléfonos inteligentes.
Greenpeace, sugiere a la industria desarrollar diseños que duren más tiempo, capaces de ser reparados o actualizados de manera fácil y económica. Además, insiste en eliminar productos químicos peligrosos del propio producto y de su proceso de fabricación, ya que esto protege a los consumidores y la salud y seguridad de los trabajadores.
Después del retiro en el mercado de 4.3 millones de Galaxy Note 7 de la compañía Samsung, la organización ambiental pidió reciclar los equipos, y tú puedes sumarte a la acción sólo con tu firma aquí.
JZCD