Estados Unidos colocó de nueva cuenta a Irán a la cabeza de los países del mundo promotores del terrorismo, tras acusar a Teherán de promover la desestabilización en varios países a través del Medio Oriente y el norte de África mediante el apoyo a grupos armados.
En su informe anual sobre terrorismo 2016, difundido este miércoles, el Departamento de Estado resaltó no obstante que los atentados ocurridos el año pasado se redujeron en un 9.0 por ciento en comparación con el año precedente, a pesar de la actividad de grupos como el Estado Islámico (EI).
“Irán continuó siendo el principal patrocinador estatal del terrorismo durante 2016, conforme grupos apoyados por Irán mantuvieron su capacidad para amenazar a los intereses y los aliados estadunidenses”, señaló el reporte.
El documento destacó en particular el papel que jugó la Guardia Revolucionaria y otros actores aliados de Irán “para desestabilizar los conflictos militares en Irak, Siria y Yemen”.
Aseguró que Irán continuó reclutando combatientes de toda la región para unirse a las milicias chiitas afiliadas a Teherán, para participar en conflictos en Siria e Irak.
Por su parte, la organización Hezbolá (Partido de Dios), considerada un brazo operativo de Irán, ha continuado desarrollando sus capacidades de ataque a largo plazo y su infraestructura en todo el mundo, de acuerdo con el gobierno estadunidense.
Fuera de los actores estatales, el reporte atribuyó al grupo yihadista Estado Islámico (EI) la responsabilidad por la mayoría de los ataques y las víctimas durante 2016, manteniendo una capacidad letal operativa, a pesar de la pérdida de terreno en Irak y Siria.
Pese a las actividades de Irán y grupos como el EI, Boko Haram y al-Shabab, estos dos últimos limitados a África, el número total de ataques terroristas en 2016 fue de 11 mil 072, una baja de 9.0 por ciento en comparación con los 11 mil 774 de 2015.
Esta reducción estuvo acompañada por una disminución de 13 por ciento en la cifra de muertes provocadas por ataques terroristas, que en 2016 ascendió a 25 mil 600 fallecidos.
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