En esta mitad de semana el peso mostró una depreciación de 1.34 por ciento o 25.5 centavos al final de la jornada cambiaria, y cotizó alrededor de 19.36 pesos por dólar, informó Banco Base.
La institución financiera atribuyó el retroceso de la divisa mexicana como consecuencia directa de una desaceleración en la economía mundial, lo cual generó un ambiente de riesgo en los participantes del mercado.
Debido a ello, diversas monedas también resultaron afectadas, como la lira turca, que registró una fuerte depreciación durante las primeras horas de la jornada; el rand sudafricano, el cual perdió 1.27 por ciento debido a la probabilidad de que la calificadora Moody’s retire su grado de inversión, así como el real brasileño, cuyo índice bajó 3.13 por ciento.
En línea con las devaluaciones, las preocupaciones de bajo crecimiento económico aumentaron, luego de que Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo, reiterara la necesidad de mantener una política monetaria acomodaticia.
Además, el gobernador del Banco Central de Nueva Zelanda, Graeme Wheeler, indicó que el próximo movimiento en su cobro de tasa podría tratarse de un recorte, después de que la Reserva Federal (Fed) mantuviera su tasa de interés en los mismos índices.
Tras este hecho, Banco Base indicó que existen grandes conjeturas por parte del mercado, el cual considera una alta probabilidad de observar un recorte en la tasa de interés de la Fed rumbo a cierre de año.
De igual forma, señaló que la moneda nacional, al ser la divisa con más liquidez en Latinoamérica, es empleada para especular sobre las economías emergentes, por lo que si el peso fluctúa con bajos índices, las demás monedas de la región probablemente lo harán también.
En el escenario nacional, el día de hoy se publicaron los datos del sector externo que resultaron poco favorables para el país, pues las exportaciones mostraron una reducción en su tasa anual, la cual se ubicó en 3.4 puntos porcentuales durante febrero, su menor ritmo desde noviembre pasado, debido a la desaceleración de las exportaciones no petroleras.
Asimismo, Carlos Urzúa, secretario de Hacienda y Crédito Público, aseguró que los ingresos del gobierno federal crecieron a una tasa anual de 2.6 por ciento en el primer bimestre, y sostuvo que no recortará el gasto público, pero realizará un ajuste al interior de la administración.
Bajo este panorama, el dólar libre finalizó la jornada cambiaria hasta en 19.67 pesos, con una variación al alza de 21 centavos en comparación con el cierre anterior, y se adquirió en un precio mínimo de 18.55 pesos en bancos de la Ciudad de México.
Con información de NOTIMEX